SOLICITUDES AL CES
Bioquímicos clínicos en incertidumbre por no haber sido registrados como profesionales de la 'Salud y Bienestar'
Esta situación los perjudicaría profesionalmente
Viernes, 07 de noviembre de 2025, a las 15:08
Patricia Erazo, presidenta de la Sebiocli, y Cynthia Tapia, bioquímica clínica de la UCE.
|
Jonathan Veletanga. Quito
La Sociedad Ecuatoriana de Bioquímica Clínica (Sebiocli) y el Colegio de Químicos, Bioquímicos y Farmacéuticos de Pichincha (CQBFP) han realizado una solicitud formal al Consejo de Educación Superior (CES) para que reclasifique a los bioquímicos clínicos dentro del Anexo II del Reglamento de Armonización de la Nomenclatura de Títulos Profesionales y Grados Académicos que confieren las Instituciones de Educación Superior.
Esta medida se da porque el documento excluye a estos profesionales del Campo de la “Salud y Bienestar”, lo que los perjudicaría profesionalmente, además de que los excluiría del régimen de Carrera Sanitaria.
Cynthia Tapia, bioquímica clínica de la Universidad Central del Ecuador (UCE) y representante de un grupo de profesionales afectados, ha comentado a EDICIÓN MÉDICA que en 2022 notó que
su título de grado de Bioquímica Clínica estaba registrado en el campo de las Ciencias y no en el campo de la Salud y Bienestar, como en el caso de otros colegas. En ese entonces no prestó mucha atención a ese detalle porque empezó a trabajar en su área, hasta que uno de sus compañeros, quien también había evidenciado esta “mala clasificación”, comenzó hacer gestiones con las autoridades de educación superior para que se corrigiera.
De acuerdo a la investigación realizada por la Sebiocli y los profesionales afectados, con base a datos oficiales, 537 bioquímicos clínicos están registrados adecuadamente en el campo de la Salud y Bienestar, mientras que
387 están registrados en el campo amplio de las Ciencias, quienes se graduaron en diferentes cohortes en la UCE, la Pontifica Universidad Católica del Ecuador (PUCE) y la Universidad Interamericana del Ecuador (actualmente cerrada).
A pesar de tener la misma denominación del título están registrados en diversos campos, lo cual
evidencia claramente un error, ha sostenido
Patricia Erazo, presidenta de la Sebiocli.
Por este motivo, han solicitado la revisión y la actualización de este documento, con la finalidad de incluir a estos 387 bioquímicos clínicos dentro del grupo de profesionales de la Salud y Bienestar. Para esto han presentando la documentación correspondiente que sustenta su rol dentro del sistema nacional de salud, particularmente en el ámbito del diagnóstico clínico y análisis del laboratorio clínico, además de que este error se originó por omisiones de las propias universidades antes de que esta competencia pase al CES.
Por lo tanto, debería partir, desde las mismas universidades, el proceso de rectificación, con la finalidad de que sus títulos sean ubicados correctamente en el campo de la Salud y Bienestar. No obstante,
no hay ayuda ni respaldo hacia sus graduados, ha mencionado Erazo.
Otro factor que complica esta situación es que la carrera de Bioquímica Clínica, en las universidades mencionadas,
actualmente no está vigente. En este sentido, el CES ha señalado, en un informe entregado a la Sebiocli (al cual EDICIÓN MÉDICA tuvo acceso), que no existe información respecto al perfil profesional de la carrera y no considera pertinente actualizar este documento, ya que “son las instituciones de educación superior, bajo su autonomía responsable, quienes presentan al CES propuestas de nuevas denominaciones de carreras, programas y titulaciones, para ser incorporadas en el Anexo II del RANT previo su aprobación”.
EDICIÓN MÉDICA ha pedido información respecto a este caso al CES y a la Facultad de Ciencias Químicas de la UCE (porque la mayoría de profesionales perjudicados pertenecen a esta universidad). Sin embargo, hasta la publicación de esta nota, no ha tenido una respuesta favorable.
¿Por qué es importante incluirlos dentro de los profesionales de la Salud y Bienestar?
Tapia y Erazo han explicado que
el bioquímico clínico es parte fundamental del equipo de salud, ya que cumple un rol importante para el diagnóstico y monitoreo de enfermedades. Estos profesionales trabajan en los laboratorios clínicos y hospitales puesto que se especializan en el análisis de muestras biológicas, como sangre, orina y tejidos. Es decir, tienen un rol relevante dentro del sistema nacional de salud, tanto a nivel público como privado.
“A nivel privado en nuestros propios laboratorios como representantes legales y como responsables técnicos. Sin embargo, al quedar fuera del campo de la salud,
no podemos ser responsables técnicos (no podrían firmar los resultados de los exámenes de laboratorio), que es la importancia de la carrera. En cambio, a nivel público, los profesionales corren el riesgo de ser desvinculados laboralmente”, ha enfatizado Erazo.
Esta categorización errónea también los perjudica gravemente a nivel profesional porque
los excluye de la Ley Orgánica de Carrera Sanitaria, ya que no podrán acceder a este régimen debido a que no son considerados como profesionales de la salud y Bienestar, así como lo determina el Reglamento emitido hace unos meses.
Asimismo, reduce aún más las posibilidades de que se abran partidas específicas para estos profesionales. Actualmente, estas ya son escazas, al punto de que “compañeros que trabajan en el sector público están con partidas de tecnólogos médicos o de licenciados… Entonces, es una situación preocupante para quienes quieran incursionar en el ámbito público”, ha agregado la representante de la Sebiocli.
Por lo tanto, Tapia ha resaltado que es urgente que las autoridades de educación superior acojan su último pedido de revisión y actualización. “El CES puede hacer una clasificación correcta”, solo se requiere voluntad, ya que se ha demostrado con evidencia que este problema se generó por omisión, ha sostenido.
“El error de una mala clasificación, que tal vez por muchos años estuvo resguardada bajo papeles,
está y va afectarnos como profesionales”. Por eso, se pide apoyo para solucionarlo de manera inmediata. “Hemos agotado todas las instancias, pero lastimosamente hemos encontrado falta de compromiso y de empatía” por parte de todas las entidades implicadas”, ha expresado la profesional afectada.