Edición Médica

Santiago Carrasco (FME) y Rodrigo Henríquez (UDLA).

Jonathan Veletanga. Quito
El proceso de vacunación contra la CoVID19 en el país será vigilado por un Comité de Transparencia conformado por Gonzalo Mantilla Cabeza de Vaca, Carlos Ortega Maldonado, Carlos Montúfar Freile.
 
Mantilla es máster en Educación Médica y decano del Colegio de Ciencias de la Salud de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), Ortega es doctor en Jurisprudencia y Canciller de la Universidad Espíritu Santo de Guayaquil, y Montúfar es PHD en Física, cofundador e integrante del Consejo de Regentes de la USFQ. Los tres han asumido el reto de “verificar” la transparencia de todo el proceso.
 
Con este anuncio el Gobierno busca ganar confianza, sin embargo, parece que ha tenido el efecto contrario. Ha generado mayor escepticismo e incluso dudas.
 
Según Santiago Carrasco, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana (FME) y de las Federaciones Unidas de Profesionales de la Salud del Ecuador (FUPSE), este comité nombrado “a dedo” se crea más por la presión social que por las “ganas de hacer bien las cosas”.
 
“Nuevamente se está nombrando, aparentemente a gente del más alto nivel, pero en este momento no son necesarios para el asunto de la pandemia”, ha dicho Carrasco, en diálogo con EDICIÓN MÉDICA. El galeno ha considerado que se requiere gente con experticia en Epidemiología, Infectología, Salud Pública, entre otras ramas relacionadas.
 
El gremio está dispuesto a proponer nombres de expertos de todas las ramas para que ayuden al Estado a generar lineamientos adecuados para el manejo de la pandemia.
 
Carrasco ha reiterado que los gremios han exigido desde “hace tiempo” la conformación de una mesa de expertos que brinden los lineamientos para la pandemia y de mesas de veeduría para todo el proceso de vacunación (negociación, compras, distribución, manejo, etc.). Estas deberían ser integradas por representantes de los profesionales de la salud, académicos, científicos y representantes de la sociedad civil.
 
“Lastimosamente esto no lo van hacer porque de hecho hay intereses de tipo político. Entonces, pensamos que continúan equivocándose y siguen haciendo las cosas fuera del contexto científico-académico”, ha enfatizado.
 
Rodrigo Henríquez, docente investigador de la Universidad de Las Américas (UDLA), ha acotado que el mecanismo anunciado por el presidente de la República no es el más apropiado. En vez de nombrar a tres personas, hubiera sido mejor que se planteen diferentes comités de veeduría en las ciudades y unidades médicas donde se van administrar las vacunas.
 
“Puede ser que tengan trayectorias muy notables, pero probablemente sería mucho mejor un mecanismo de veeduría ciudadana, donde se formen comités mixtos”, con representantes de los profesionales de la salud, de los hospitales y la ciudadanía. Este es un “verdadero proceso” de acompañamiento inclusivo y amplio, ha sostenido.
 
Para Henríquez, las autoridades de Gobierno “simulan” realizar procesos “justos y transparentes”, pero al final fallan en su implementación.
 
En este sentido, el docente de la UDLA ha recordado que desde la academia se han dado insumos técnicos y científicos para mejorar la toma de decisiones y plantear soluciones a problemas concretos, como por ejemplo la escasez de pruebas diagnósticas, reducción de costos, automatización de los procesos de toma de muestras, pero lamentablemente el Gobierno ha tenido una “pobre recepción” a los planteamientos.
 
¿Qué deberían hacer las autoridades para ganar confianza de la ciudadanía?
 
Carrasco ha señalado que el Estado debería dejarse ayudar, por ejemplo FUPSE ha hecho una serie de recomendación que ayudarían a encaminar el manejo de la pandemia. Entre las principales, incrementar el diagnóstico, la vigilancia epidemiológica y la comunicación de riesgo.
 
Por su parte, Henríquez ha agregado que es importante transparentar la estrategia de implementación de las vacunas contra la CoVID19 (cronograma, procesos de selección, etc.) así como las negociaciones con las farmacéuticas. “Los documentos técnicos oficiales deberían estar colgados en la página del MSP”, pero se ha mantenido en secreto todo esto.
 
Asimismo, ha mencionado que las diferentes instancias estatales deben mejorar la comunicación. “Es evidente que no hay una comunicación clara y asertiva”, incluso se han dado múltiples contradicciones entre funcionarios de Gobierno, esto lamentablemente genera desconfianza.
 
“Por los múltiples errores de comunicación y el no cumplimiento de las promesas a lo largo de la pandemia, se ha generado escepticismo y desconfianza en la ciudadanía”, lo que se ha convertido en una barrera para manejar adecuadamente la emergencia sanitaria. Un claro ejemplo de esto se vio cuando el ministro de salud se vacunó.
 
Lo que en otros países puede verse como un acto para generar confianza, en Ecuador ha generado una reacción opuesta. “Creo que esto tiene que ver con errores de comunicación y que las acciones no calcen con las expectativas que se habían generado”, por lo tanto muchas personas no vieron como una buena acción de priorización de este primer lote de vacunas que llegó al país, ha opinado Henríquez.
 
A criterio de Carrasco y Henríquez hubo mucha expectativa con el plan piloto de vacunación contra la CoVID19, que fue sobredimensionado. Por ello se generó malestar en la ciudadanía, pues no llegaron las dosis prometidas y el número que arribo no responde a las necesidades actuales.
 
“Ha sido un show mediático que realmente nos entristece, rechazamos porque nos parece una falta de respeto”, ha expresado Carrasco.

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