ENFERMEDAD CRÓNICA
OMS publica directriz mundial sobre el uso de medicamentos GLP-1 para tratar la obesidad
El documento proporciona recomendaciones condicionales clave
Miércoles, 03 de diciembre de 2025, a las 16:13
La directriz enfatiza la importancia del acceso equitativo a las terapias GLP-1.
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Redacción. Quito
Para abordar el creciente problema de salud mundial que supone la obesidad, que afecta a más de mil millones de personas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado su
primera directriz sobre el uso de terapias con péptido similar al glucagón-1 (GLP-1) para tratar la obesidad como una enfermedad crónica y recurrente.
La directriz enfatiza la importancia del acceso equitativo a las terapias GLP-1 y de preparar los sistemas de salud para su uso. Sin políticas deliberadas, el acceso a estas terapias podría exacerbar las disparidades sanitarias existentes. La OMS insta a tomar medidas urgentes en materia de fabricación, asequibilidad y preparación de los sistemas para satisfacer las necesidades mundiales.
Incluso con una rápida expansión de la producción,
se proyecta que las terapias GLP-1 llegarán a menos del 10 por ciento de quienes podrían beneficiarse para 2030. La directriz insta a la comunidad mundial a considerar estrategias para ampliar el acceso, como la adquisición conjunta, la fijación de precios escalonados y las licencias voluntarias, entre otras.
La obesidad afecta a personas de todos los países y se asoció con 3,7 millones de muertes en todo el mundo en 2024. Si no se toman medidas decisivas, se proyecta que el número de personas con obesidad se duplicará para 2030, según datos de la OMS.
Frente a este panorama, en septiembre de 2025, la OMS añadió las terapias GLP-1 a su Lista de Medicamentos Esenciales para el manejo de la diabetes tipo 2 en grupos de alto riesgo. Y con la nueva directriz, emite
recomendaciones condicionales para el uso de estas terapias con el fin de ayudar a las personas con obesidad a superar este grave problema de salud, como parte de un enfoque integral que incluye una alimentación saludable, actividad física regular y el apoyo de profesionales de la salud.
“La obesidad es un importante problema de salud mundial que la OMS se ha comprometido a abordar, apoyando a países y personas de todo el mundo para controlarla de forma eficaz y equitativa.
Nuestras nuevas directrices reconocen que la obesidad es una enfermedad crónica que puede tratarse con atención integral y de por vida. Si bien los medicamentos por sí solos no resolverán esta crisis sanitaria mundial, las terapias con GLP-1 pueden ayudar a millones de personas a superar la obesidad y reducir sus efectos adversos”, ha señalado Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
La nueva orientación de la OMS contiene
dos recomendaciones condicionales clave:
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Las terapias con GLP-1 pueden ser utilizadas por adultos, excluyendo a las mujeres embarazadas, para el tratamiento a largo plazo de la obesidad. Si bien la eficacia de estas terapias para tratar la obesidad y mejorar los resultados metabólicos y de otro tipo fue evidente, la recomendación es condicional debido a la escasez de datos sobre su eficacia y seguridad a largo plazo, su mantenimiento y suspensión, sus costos actuales, la preparación inadecuada del sistema de salud y las posibles implicaciones para la equidad.
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Se pueden ofrecer intervenciones conductuales intensivas, incluyendo intervenciones estructuradas que incluyan una dieta saludable y actividad física, a los adultos con obesidad a quienes se les hayan prescrito terapias con GLP-1. Esto se basa en evidencia de baja certeza que sugiere que podría mejorar los resultados del tratamiento.
En este contexto, la OMS ha aclarado que si bien las terapias con GLP-1 representan la primera opción de tratamiento eficaz para adultos con obesidad, por sí solos no resolverán el problema.
La obesidad no es solo una preocupación individual, sino también un desafío social que requiere una acción multisectorial. Abordar la obesidad requiere una reorientación fundamental de los enfoques actuales hacia una estrategia integral basada en
tres pilares:
- Crear entornos más saludables mediante políticas sólidas a nivel de población para promover la salud y prevenir la obesidad.
- Proteger a las personas con alto riesgo de desarrollar obesidad y comorbilidades relacionadas mediante pruebas de detección específicas e intervenciones tempranas estructuradas.
- Garantizar el acceso a una atención centrada en la persona y durante toda la vida.
La OMS ha elaborado ??la guía en respuesta a las solicitudes de sus Estados Miembros para abordar los desafíos que plantea la obesidad. El proceso de elaboración implicó un análisis exhaustivo de la evidencia disponible y la consulta con una amplia gama de partes interesadas, incluyendo personas con experiencia propia. Esta guía es un resultado clave del plan de aceleración de la OMS para frenar la obesidad y se actualizará periódicamente a medida que surjan nuevas evidencias.