Edición Médica

Ramiro Almeida, presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Oftalmología.

Jonathan Veletanga. Quito
Ramiro Almeida, cirujano oftalmólogo de la Clínica Santa Lucía, ha sido nombrado presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Oftalmología para el periodo 2017-2019. REDACCIÓN MÉDICA ha conversado con el especialista para conocer los ejes de trabajo en los que centrará su gestión.
 
“Una de las misiones que me he propuesto para este periodo es lograr que el posgrado de Oftalmología sea un posgrado de alto nivel en el país”, ha dicho Almeida.
 
¿Cuáles van a ser los ejes de trabajo para su periodo presidencial?
 
Una de las misiones que me he propuesto para este periodo es mejorar la oportunidad para los posgrados dentro del Ecuador, es decir, lograr que el posgrado de Oftalmología sea un posgrado de alto nivel en el país. Nuestros médicos tienen que buscar opciones en el exterior porque aquí están cerradas las puertas. Esto no es posible.
 
Además de promover los cursos de posgrado en el país. También queremos tener una participación importante en la reforma al Código Orgánico de la Salud (COS).
 
De igual manera, seguiremos impulsando la educación médica continua, que es uno de los ejes principales de la Sociedad Ecuatoriana de Oftalmología.
 
¿Cuál es la deficiencia de los actuales posgrados en Oftalmología?
 
El nivel con el que sales los chicos de posgrado es deficiente. De tal manera que tienen que ser posgrados que estén a la altura de cualquier hospital del mundo.
Hay docentes que no están en condiciones de ser profesores cuando en Ecuador tenemos profesores que son de lujo. Muchos oftalmólogos de nuestro país son invitados a dar charlas en diferentes países. Esto es lo que vamos a cambiar.
 
¿Actualmente la sociedad está participando en la construcción del COS?
 
Claro que estamos participando. La sociedad es asesorada por un abogado, quien está analizando el COS al igual que todos los miembros de la sociedad. Todos estamos aportando con ideas para enviarlas al presidente de la Comisión de Salud para que las revise.
 
¿Desde la sociedad cómo ven el COS?
 
El COS tiene muchísimos puntos que van en contra de la clase médica. Nosotros estamos analizando todo esto para sacar un documento, en donde plantearemos que se hagan algunos cambios que sean para beneficio de la Salud en el país.
 
Cambiando de tema ¿cómo se ha venido desarrollando la Oftalmología en Ecuador?
 
La Oftalmología en nuestro país ocupa uno de los primeros lugares en el mundo. Por ejemplo, tenemos tecnología de última generación que no hay en la gran mayoría de países de Latinoamérica.
 
Todos los centros que hacen Oftalmología van muy bien. Además, los médicos tienen una capacidad y una habilidad quirúrgica muy grande. Este es uno de los privilegios de los cirujanos ecuatorianos, no solo en Oftalmología sino en todas las ramas.  
 
La especialidad tiene el mismo nivel que cualquier país desarrollado. Ejemplo, un grupo de ecuatorianos está invitado a dar conferencias sobre retina y vítreo en el ‘Euretina 2017’, un evento que acoge a todos los oftalmólogos de Europa.
 
En este sentido, ¿cuál es el reto actual para los oftalmólogos ecuatorianos?
 
El reto más importante es erradicar la ceguera por catarata y por enfermedades de la retina. Tenemos un índice muy alto de pacientes que pierden la visión por estas patologías, las cuales son de fácil curación.
 
Estos son los objetivos más grandes que tenemos hoy por hoy los cirujanos de ojos.
 
¿Por qué estas enfermedades tienen una prevalencia alta en el país?
 
Principalmente por dos motivos: porque son mal diagnosticadas y porque la gente no puede acudir a las hospitales y clínicas privadas.
 
Un problema que tienen las personas cuando van al Seguro Social es que les dan turno para que se operen después de mucho tiempo. Esto sucede porque el IESS no se abastece para cubrir toda la demanda en esta especialidad.
 
Para concluir, ¿cuál es la relación de la sociedad con las autoridades sanitarias?
 
Nosotros trabajamos en muchas cosas que el ministerio nos solicita. Somos un apoyo para cuando se va hacer algún cambio en las políticas públicas de Salud. Somos parte del Sistema Nacional de Salud, por tanto, la sociedad no puede estar peleada con las autoridades sanitarias. 

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