Edición Médica

Sesión del Concejo Metropolitano de Quito.

Redacción. Quito
Con 16 votos a favor, el Concejo Metropolitano de Quito ha aprobado una ordenanza que controla y regula la excepción de restricción vehicular “Pico y Placa” para las personas con discapacidad y su entorno de cuidado en el Distrito Metropolitano.
 
El concejal Emilio Uzcátegui, proponente de la iniciativa, ha mencionado que “la normativa habilita para que las familias de las personas con discapacidad puedan circular durante el horario de pico y paca. Con esta medida buscamos fortalecer la autonomía de las familias y de cuidar a quienes nos cuidan”.
 
Antes, la medida de restricción vehicular no tenía prevista la circulación de personas con discapacidad durante el horario establecido, por lo que las personas que se encargan de su cuidado no podían acudir a terapias, centros de estudio o cumplir con actividades personales.
 
Uzcátegui ha mencionado que esta medida beneficia a 25.000 personas con discapacidad en Quito. El plazo de aplicación de la ordenanza es de 90 días, tiempo en el cual se realizará la implementación de los procesos tecnológicos para el registro de los beneficiarios y realizar los procesos de control por parte de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT).
 
Al respecto, Ana María Cabezas, secretaria de la Fundación Autismo Visible, ha explicado que, si una madre tenía que ir a terapia o a las escuelas, solo se les permitía la movilización con las personas con discapacidad, lo que impedía movilizarse a sus trabajos u hogares hasta que terminara la restricción. Además, ha recalcado que “la aprobación de la ordenanza representa un avance en beneficio de la inclusión”.
 
De su parte, la concejala Analía Ledesma ha felicitado la aprobación de esta ordenanza, “porque reconoce la necesidad de que la ciudad piense en la inclusión desde la óptica de las personas cuidadoras, es esencial que esa perspectiva se amplíe al ejercicio de otros derechos, las personas que cuidan también tienen la necesidad de ser cuidadas, en ese sentido, la ciudad debe comprometerse profundamente a trabajar para proteger también a las personas cuidadoras”.

---