Edición Médica

Arturo Quizhpe y Romeo Hilaire.

Cristina Coello. Quito
En el Ecuador y en general en América Latina “no existe información precisa ni monitoreo o vigilancia” sobre la resistencia antimicrobiana. “La información es limitada y son muy pocos los datos que podemos encontrar”, ha señalado a REDACCIÓN MÉDICA, Arturo Quizhpe, coordinador regional de ReAct Latinoamérica.
 
La ReAct es un programa internacional de la Universidad de Uppsala, Suecia, encargada de la acción frente a la resistencia a los antibióticos, considerando que no solo es un problema médico sino también ecológico y ambiental, ha precisado Quizhpe, también docente universitario en Cuenca.
 
A decir del especialista, la resistencia antimicrobiana puede ser uno de los causantes del fracaso en los avances de la medicina moderna por las infecciones multirresistentes las cuales pueden ser adquiridas en los servicios y unidades de salud, “especialmente en las salas de cirugía, unidades cuidados intensivos, emergencia, pero también en la propia comunidad”.
 
En este punto, coincide con Quizhpe, el infectólogo del Hospital General Docente Calderón (HGDC), Romeo Hilaire, quien ha considerado que “estamos viviendo en una época donde hay muchos usos irracionales de los antibióticos y eso ha creado que cada día se desarrollen nuevas resistencias” a los tratamientos antibióticos.
 
En el HGDC existe una comisión de uso racional de antibióticos que cada 6 meses analiza la base de datos de los cultivos realizados a sus pacientes y examinan la resistencia y sensibilidad de los antibióticos utilizados, ha comentado Hilaire.
 
Según este especialista, en esa unidad de salud pública, tienen “alta resistencia tanto en la población (de la zona) como en el hospital a la Ciprofloxacina, debido principalmente “al uso irracional que ha hecho la población” de ese compuesto.
 
“Muchas personas lo han usado en infecciones y lo adquieren en farmacias. La resistencia es mayor al 70 por ciento a ese antibiótico. Eso nos hace difícil el trabajo porque llegan resistentes y es necesario usar antibióticos más fuertes (de amplio espectro)”.

Eso implica que el hospital “gasta más en tratamiento y no es bueno para la comunidad, porque el paciente se complica. Antes no se veía tanta resistencia”, ha comentado Hilaire.
 
Por su parte, Carla Ayala, enfermera especialista en Epidemiología del HGDC, ha precisado que en su unidad se han implementado “ciertas acciones ligadas a los procesos asistenciales. Tenemos un listado de medicamentos restringidos que son autorizados previo conocimiento del infectólogo y lo que se busca es un uso racional de antibióticos”.
 

Carla Yala, HGDC.

“La resistencia es un problema a nivel mundial y es una suma de usos irracionales de antibióticos”, empezando con la industria alimenticia de carnes que los utiliza para el crecimiento y engorde de animales. “Estas partículas de antibióticos se ingieren y no es la persona como tal la que hace la resistencia, sino las bacterias”, ha aclarado.
 
Para Ayala, el personal sanitario debe recetar el antibiótico desde la primera línea, “a veces lo que sucede es que utilizan el medicamento nuevo y se saltan otras categorías que fácilmente podrían utilizarse en el paciente”.
 
Pero la especialista ha advertido, además, que muchos pacientes no terminan los tratamientos enviados por los médicos, ante lo cual ha considerado que es necesario “sensibilizar sobre la adherencia en la toma total del medicamento.
 
Manifiesto de organizaciones
 
Al conmemorarse la Semana Mundial de Concientización sobre el Uso Adecuado de los Antibióticos, la ReAct ha emitido un manifiesto donde exhorta a la comunidad internacional a “reafirmar y fortalecer los esfuerzos para la contención de la resistencia bacteriana”.
 
Además, han exigido a los gobiernos y autoridades sanitarias crear las “condiciones necesarias para el desarrollo y ejecución de planes nacionales de acción” contra este problema tanto a nivel de los servicios de salud humana como de la crianza de animales para consumo humano “sustentados en un enfoque ecológico”.
 
Según Quizhpe, “el uso inadecuado y masivo de antibióticos está enloqueciendo al mundo microbiano que cada vez se vuelve más agresivo, porque tiene la facilidad de mutar, cambiar y adquirir mecanismos de resistencia a lo cual ningún antibiótico puede actuar”.
 
Ante ello, “el país necesita tomar con mucha rigurosidad esta situación y analizar lo que está sucediendo”, ha advertido.

---