Edición Médica

Wilson Tenorio (der.) y mimebros de la FEM en el centro de salud de Bastión Popular baleado.

Redacción. Quito
La Federación Médica Ecuatoriana (FME) ya tiene el primer reporte de un médico rural herido (en la mano) tras un acto violento en un centro de Salud de Quinindé (Esmeraldas).
 
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, el presidente de la FME ha informado que la familia del médico ha solicitado ayuda a la institución ya que se sienten atemorizados por las amenazas que dejaron los delincuentes.
 
Tenorio ha ratificado que muchos profesionales de la salud no se atreven a denunciar por miedo a represalias, pero ha asegurado que varios son víctimas de las denominadas ‘vacunas’ extorsivas (amenazas y cobro de dinero para garantizar seguridad) principalmente en la zona 8 de Salud (Guayas).
 
El representante de los médicos ha sido enfático en señalar que responsabiliza a las autoridades por la seguridad del personal de salud tras los ataques al centro de salud de Bastión Popular en Guayaquil y la serie de actos violentos en Santo Domingo y Esmeraldas los últimos días.
 
Así mismo ha detallado que junto a representantes del Colegio de Médicos del Guayas han recorrido varias unidades de salud y principalmente a los que se ubican cerca a los centros de reclusión penitenciaria y han constatado la falta de seguridad, además del temor de sus trabajadores.
 
“Existen guardias de seguridad contratados, pero sin armas. Esta falta de protección nos preocupa y hemos manifestado a las autoridades sanitarias de la zona esta situación para que gestione con la gobernación o las autoridades de gobierno el mejoramiento de protección de estos lugares ubicados en zonas sumamente peligrosas y expuestos a violencia. Estamos pasando de la pandemia (de la COVID-19) a la epidemia de la violencia, fruto de este narco cultura que está imperando” en nuestra sociedad, ha considerado.
 
Según Tenorio ya han conversado en el ministerio de Gobierno y han solicitado resguardo policial en todas las unidades de salud del país ante la ola de inseguridad que atraviesa el país y ha mencionado que en el Hospital Delfina Torres de Concha en Esmeraldas “existen problemas terribles”.
 
“Como Federación estamos muy preocupados y se han comprometido a dar resguardo los próximos días, esperamos que se cumpla e iremos monitoreando junto al Defensor del Pueblo al menos en la provincia del Guayas”, ha añadido en representante gremial.
 
Estrés laboral
 
Y frente a la ola de violencia, Tenorio también ha confirmado que existe “estrés laboral” entre los trabajadores de varias unidades de salud y “hay bastante preocupación” entre el personal.
 
Según el dirigente, en la provincia del Guayas ya se ha capacitado en temas de seguridad a un grupo de profesionales especialmente en lo relacionado a las vacunas extorsivas. “Hay muchos profesionales que recibieron llamadas de ese tipo”, ha insistido.
 
En ese sentido también ha confirmado que los servicios de salud no se han suspendido a pesar del temor que tienen los trabajadores.
 
“Lastimosamente está deficiente la seguridad de cada uno de los profesionales de la salud y las instituciones. Responsabilizamos a las autoridades policiales, de gobierno, o del ministerio del Interior” ante posibles agresiones ha dicho Tenorio quien además ha reiterado que “en la brevedad posible eviten un desenlace fatal sobre todo en las provincias del Guayas y Esmeraldas” y se designe la debida seguridad.

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