Edición Médica

Nathalie El Omeiri, consultora de OPS.

Redacción. México
Tras un estudio realizado por varios expertos se ha propuesto ajustar la formulación de la vacuna contra la influenza para mejorar su efectividad, ha comentado Nathalie El Omeiri, consultora regional sobre inmunización de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS).
 
El Omeiri, quien también es parte del equipo de investigadores, ha sugerido aprovechar el momento justo antes de la epidemia estacional y aplicar la vacuna para mejorar su efectividad, controlar casos severos de enfermedades asociadas, reducir la tasa de hospitalización y disminuir la mortalidad en algunos países latinoamericanos.
 
En el estudio se ha propuesto a los países analizados que usan la formulación de la vacuna para el hemisferio norte (Costa Rica, República Dominicana, Cuba y Ecuador) y que es suministrada a la población en octubre, consideren los beneficios de aplicarla durante abril y garantizar la protección hasta septiembre.
 
La recomendación ha surgido luego de que los resultados mostraran que en la mayoría de los países analizados la estacionalidad del virus se presentó durante mayo-agosto.
 
El análisis de datos epidemiológicos y virológicos de 16 países latinoamericanos en los períodos 2002-2008 y 2011-2014, ha permitido identificar el mes de abril como el más oportuno para aplicar la vacuna y determinar su formulación según los virus circulantes, señala la investigación.
 
El beneficio de este cambio radica en que las cepas de influenza durante las epidemias entre mayo y agosto con frecuencia coinciden con los componentes recomendados para la vacuna, lo que implica mayor efectividad al existir concordancia entre el virus circulante y las cepas incluidas en la vacuna.
 
 “El motivo del cambio no es porque la vacuna tenga poco impacto, sino por una cuestión de oportunidad. Es decir, el mejor momento para vacunar es justo antes de la epidemia estacional esperada. Se recomienda utilizar la vacuna más reciente disponible en ese momento”, ha indicado El Omeiri.
 
La investigación también ha recomendado reforzar la cobertura en países con doble epidemia de gripe anual como algunas regiones de Brasil y Ecuador.
 
“Deben tener en cuenta el efecto de aumentar la cobertura de vacunación en las poblaciones objetivo durante la epidemia principal en abril-septiembre, antes de invertir en una segunda campaña de vacunación durante octubre-noviembre”, ha precisado el estudio.
 
“Coincido con la recomendación. Podemos usar las vacunas todo el año, pero es mejor cuando se organizan campañas de inmunización al menos dos semanas antes del pico de la temporada y cuando inmunizamos al mayor número de individuos para obtener protección directa (anticuerpos) e indirecta (los inmunizados protegen a los no vacunados al no aportar al contagio)”, ha añadido Lucía Ferro Bricks, de la Asociación Brasileña de Inmunización.

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