Edición Médica

Wilma Freire, experta en nutrición.

Cristina Coello. Quito
El problema de la obesidad y el sobrepeso está aumentando rápidamente en el país, al igual que las deficiencias en micronutrientes, que afectan también a las personas con desnutrición, lo cual se convierte en una doble carga de malnutrición.
 
De allí que, según Wilma Freire, codirectora del instituto de Investigación en Salud y Nutrición de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ) ha señalado a REDACCIÓN MÉDICA que el país requiere de un programa y monitoreo frente a este problema.
 
“No podemos dejar de mirar a la población que necesita manejar las dos perspectivas” y desde el punto de vista de la política pública es necesario “reconocer la existencia de este doble problema” en un mismo hogar, individuo, mujer o niño, ha considerado la experta.
 
Luego de ello es necesario plantear estrategias de manejo que sean acordes a la situación y “no mirar por separado el problema del sobrepeso o la desnutrición, porque tenemos que confrontar los dos”, ha añadido.
 
La propuesta
 
Frente a esta doble carga nutricional, Freire ha considerado necesario establecer programas que lo manejen y un sistema de monitoreo y evaluación “para saber cómo inciden”.
 
“Es un tema de política (pública)  que tiene que venir desde el nivel macro, en donde se identifican los diferentes niveles de atención y en esos niveles especificar cómo actuar”, ha insistido.
 
Para Freire, “si los profesionales de la salud encuentran problemas de sobrepeso, tienen que hablar necesariamente de dieta y actividad física, pero si ese mismo niño está con problemas de deficiencia de micronutrientes también hay que manejarlo simultáneamente”.
 
Por otra parte, según Freire, también hay que considerar “el entorno en que vive” un niño o paciente con sobrepeso u obesidad, y si en él se promueve una buena práctica de alimentación, para de allí, establecer las políticas para modificarlo.
 
“No podemos ignorar que más de la mitad de la población tiene sobrepeso y obesidad. Se requieren medidas multisectoriales, muy agresivas” y relacionadas a la comunicación, prestación de servicios y también regulaciones “sobre, por ejemplo, el control de la oferta de alimentos pocos saludables, educación en escuelas, promoción de mercados de productos naturales”, etc.

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