Edición Médica

Iván Duque, presidente de Colombia.

Redacción. Quito
El Gobierno Nacional de Colombia ha construido una propuesta para que los alimentos envasados incluyan el etiquetado nutricional, como una nueva estrategia para la promoción de la salud pública, con el fin de proporcionar información clara y comprensible a los consumidores, así como evolucionar el marco normativo actual, pasando de acciones voluntarias a obligatorias.

Se ha determinado incluir el sello monocromático en la parte frontal de cada alimento para que se reporte, en primera instancia, el alto nivel de azúcares añadidos, sodio o grasas saturadas que este tenga.

A su vez, con esta propuesta se han determinado los límites para establecer estos criterios en el país, los cuales están convenidos con la tendencia regulatoria regional.

Etiquetado para alimentos y bebidas.

Con esta propuesta se ha buscado también rediseñar la tabla nutricional, haciéndola más simple y aumentando el tamaño de letra, para facilitar su lectura. Incluso ha sido necesario presentar el contenido de nutrientes en 100 gramos o 100 mililitros y por porción.

“Con el nuevo modelo de etiquetado para alimentos damos un gran paso en materia de equidad porque esta es una valiosa herramienta para derrotar la desnutrición, ilustrar al consumidor para que tome la mejor decisión y combatir los malos hábitos alimenticios”, ha manifestado el presidente Iván Duque.

El último paso que Colombia dará para la adopción del etiquetado nutricional será en mayo de 2021 y su obligatoriedad, se estima, comenzará en noviembre de 2022. Estas disposiciones se implementarán en un tiempo aproximado de 18 meses una vez se expida la resolución para que la industria realice los ajustes pertinentes.

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