Edición Médica

Ximena Garzón, ministra de Salud.

Cristina Coello. Quito
La ministra de Salud, Ximena Garzón, ha anunciado la declaratoria de emergencia sanitaria focalizada por 60 días en 135 unidades de salud del Ministerio de Salud, para agilizar la adquisición de medicamentos e insumos médicos esenciales.
 
Garzón ha especificado que se han priorizado un total de 123 medicamentos esenciales, especialmente para patologías con alto riesgo de mortalidad, fármacos vitales, analgésicos, oncológicos y para enfermedades catastróficas.
 
La ministra ha detallado que la convocatoria para la adquisición de estos insumos será abierta y se cuenta con un presupuesto de 43 millones de dólares “para pagar de manera inmediata”, ha dicho.
 
El viceministro de Atención Integral en Salud, Miguel Moreira ha explicado que se mantuvieron reuniones con los productores de fármacos nacionales y se ha invitado a más de 11 mil proveedores de insumos para tener una amplia oferta y escoger la mejor.
 
“Ellos (los proveedores) han adelantado su buena predisposición para que se pueda cotizar con el mejor precio y las cantidades que vamos a requerir en esta emergencia. Queremos que exista la mayor cantidad de participación”, ha asegurado Moreira, quien adelantó, además que se ha firmado con ellos un acta de compromiso “para que todo esto salga muy bien, en beneficio de la ciudadanía”.
 
La emergencia se aplicará en unidades del Ministerio de Salud Pública (MSP) de primer, segundo y tercer nivel de las nueve zonas. Según Moreira actualmente existe un desabastecimiento del 50 por ciento de los insumos requeridos y por tanto “es una cifra crítica”, ha mencionado.
 
El viceministro ha añadido que la medida buscar sacar de la grave situación en que se encuentran las unidades de salud y que ha puesto en riesgo la vida de los pacientes.
 
Los funcionarios han explicado que, si bien la emergencia es por 60 días, las compras centralizadas y dirigidas por el MSP continuará por cinco meses y ellos mismos serán los encargados de distribuir a las diferentes unidades de salud.
 
Los medicamentos que se compren irán el 50 por ciento a hospitales de tercer nivel y el otro 50 por ciento a otras unidades. Serán fármacos que están en cero y que son indispensables para evitar riesgo de mortalidad y morbilidad.
 
Garzón ha insistido en que la compra centralizada permitirá “tener precios adecuados, justos y no existirá ningún tipo de irregularidad en el proceso”, porque además será vigilado por entidades como la Contraloría General del Estado, el Servicio de Compras Públicas (Sercop), la Superintendencia de control del poder de mercado, la Comisión Nacional Anticorrupción, la Defensoría del Pueblo y la Academia.
 
“Queremos demostrar que podemos hacer las cosas bien, que queremos salir de la situación crítica de los hospitales y por ello es un proceso bien estructurado”, ha reiterado la ministra.
 
Gerentes deben seguir otras contrataciones
 
Por otro lado, Moreira ha añadido que los gerentes hospitalarios mantienen “la obligación” de continuar los demás procesos inherentes a sus funciones como son las otras contrataciones y abastecimiento de otros medicamentos e insumos.
 
Para ello ha adelantado que ya se ha fortalecido el proceso de contratación que se realiza con el Sercop y las compras ahora son más ágiles, “se puede seguir catalogando medicamentos para que el gerente pueda adquirir fármacos de forma oportuna y eficiente”, ha dicho.
 

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